Un nuevo luto

El dolor mas grande que he sentido ha sido el de la ausencia sin palabras, tendria que decir que una parte de mi ser fue literalmente pulverizada cada vez que una de esas circunstancias apareció para trepanarme las emociones, y en ese tiempo diversos milagro se presentaron y en efecto me convertí en una mejor persona, y en efecto todo siguió adelante pero... una parte de mi se murío y posiblemente no regrese, no lo tengo claro, hacía ya mucho tiempo que no sentía ese nivel de dolor.

Lo sorprendente fue como llegaron las demás cosas, como llegó esa mujer a pedirme guía justo cuando me sentía mas desorientada y como su llamada de axuilio de cierto modo salvó mi vida del pantano, lo repito y lo repetiré mil veces, por cada momento en que su ausencia me respondió rechazo, hubo una persona difrente que me dijo eres amada y hoy se como nunca lo amada que soy, lo deseada que soy, las emociones diversas que la sola presencia de mi ser ha provocado en tantos otros seres dispuestos a darse y a darme, cosa que no había reconocido nunca, tal vez ese pedacito que murio de mi, dejó espacio para esta nueva conciencia del amor que jamás había aceptado, no me sentí amada en la época de las matadas de hambre, no lo creía cuando él fue una y otra vez a tocar a mi puerta para que volvieramos, cuando intentó decirme una y otra vez lo importante que era aún cuando yo insistiera en no reconocer cuanto me amaba, no me sentí amada en los desayunos de la madrugada en que me acompañaban a la escuela, en que temían no volver a verme y estaban, no me sentí amada cuando ese chico me dijo que no le importaba, que quería estar conmigo, ni cuando eso mismo lo dijeron una y otra vez todos esoso chicos que yo no vi nunca, poque estaba concentrada en ver lo desdichada que era, lo insuficiente que era, lo poco merecedora de ser amada y deseada por el mundo, luego pasaron los vertiginosos descubrimientos de todo el año, las mujeres de las que les he hablado, mi ansia de saber del amor y perdon y el lento descubrimiento de mi amor hacia mi y luego la catástrofe y las innumerables pruebas de amor que por primera vez pude ver, que todo fue para bien, puede que sea cierto, solo que en el transcurso, es como si una parte de mi corriendo del olocausto, se fracturara quedando inmovil sin que yo me pudiera detener a rescatarla, esa parte murío en todo aquello, y no defino que parte es, donde estaba o en quien me convertía, se solamente que ya no está aquí y que a veces la extraño, recibo con amor a la persona que soy ahora pero recuerdo vagamente los ojos brillantes de la chica que les decía por Septiembre y entre líneas que era la dueña de mundo.